domingo, 26 de enero de 2014

Restaurante Portal del Carmen, Rubielos de Mora

Precioso edificio en este sorprendente pueblo de la montaña de Teruel, a una hora de Valencia. El restaurante se encuentra en la planta baja de una casa señorial con claustro, en el que disponen las mesas en verano. Comida tradicional bien elaborada, en una carta completa y dos menus diarios. Buen jamon de Teruel , migas con huevo, alubias, crema de boletus y otras ofertas de platos propios del interior de primero. De segundo nos centramos en las carnes, pollo guisado, ternasco. ciervo, asi como algunos platos de pescado, como los piquillos rellenos o gulas a la bilbaina. Por supuesto que nos decantamos por los tradicionales, como las migas y las alubias, sabrosas y bien de puntos de coccion. De segundo tomamos ciervo con manzana, o pollo guisado. Postres cuidados, como el sorbete de manzana.
Muy buena carta de vinos, centrados en las denominaciones regionales, asi como rioja, ribera y caldos escogidos de otras regiones y algunos internacionales, a precios contenidos. Buena carta de licores 
En cuanto al trato, familiar y detallista. buen servicio del vino y gran amabilidad.

domingo, 12 de enero de 2014

Restaurante La Ponderosa. Playa Mutxavista

Visita a este restaurante de la zona de la Playa de San Juan, situado cerca de Campello, en primera línea de playa. Bonito local, con terraza, dos comedores en el piso inferior y un precioso comedor en el piso superior. Al ser un domingo y no haber reservado nos tocó comer al lado de la entrada, pero el lugar era muy agradable, al lado de la cristalera que da a la  terraza. De primero elegimos una ensalada de tomate y ventresca, y de segundo arroz con magro y pollo. Para los peques escogimos croquetas de jamón y calamares. En principio la idea era tomar un pescado, pero a la vista de los que tenían en el expositor, y como grandes aficionados al pescado de las rías gallegas, decidimos que el aspecto de los pescados no invitaba que se pareciesen ni un poco a los de nuestra tierra. Así qué quizá pecamos de precavidos, pero el pez de san Pedro, los lenguados y gallinetas se quedaron en su sitio.
En cuanto a la experiencia, trato correcto, aunque en ciertos momentos parecía que un poco de más de orden en la sala no les vendría mal. Las croquetas de jamón correctas, servidas con un monte de mayonesa ( en fin...) los calamares a la romana no eran realmente a la romana, sino sólo enharinados en harina de freír, y faltos totalmente de sazón. La ensalada muy abundante, pero el tomate estaba aún demasiado ácido, y estaría mejor con un toque de sal en cristales. En cuanto al arroz, aquí llegamos a la cocina con fundamento. Ración generosa, en su punto de cocción, con un poco de socarrat y bien sazonado. Lo mejor de la comida. Fue tan abundante que no pudimos con el postre, así que nos fuimos de paseo por la playa para bajar la comida.
En resumen, un lugar que no nos ha deparado una sorpresa, pero que se muestra correcto, y a precios no muy elevados dada la ubicación y la abundancia de las raciones.

Otro año mas, visita a Ruta Jacobea

Manteniendo la tradición de inicio de año, repetimos visita en el restaurante de Lavacolla. Siguen presentando una carta extensa con platos centrados en el producto gallego. Lo que he venido notando en las últimas visitas ea una disminución en las raciones de platos como las ensaladas, y un resultado dispar entre unos y otros platos. Creo que los pescados están pasados de cocción, independientemente del modo de elaboración, y sin embargo los guisos tienen muy buen resultado, como es el caso de los fideos con almejas.
Caso aparte son los postres, con buena relación calidad-precio, y propuestas modernizadas, como la crema de arroz con leche rebozada, presentada con helado y frutos del bosque.